1. Sólo por hoy trataré de vivir el exclusivamente el día, sin querer resolver
el problema de mi vida todo de una vez.
2. Sólo por hoy trataré de tener el máximo cuidado de mi aspecto:
cortés en mis maneras, no criticaré a nadie y no pretenderé mejorar o
disciplinar a nadie, sino a mi mismo.
3. Sólo por hoy seré feliz en la certeza de que he sido creado para la felicidad,
no sólo en el otro mundo, sino en este también.
4. Sólo por hoy me adaptaré a las cinrcunstancias, sin pretender que las
circunstancias se adapten todas a mis deseos.
5. Sólo por hoy dedicaré diez minutos de mi tiempo a una buena lectura; recordando
que, como el alimento es necesario para la vida del cuerpo, así la buen lectura
es necesaria para la vida del alma.
6. Sólo por hoy haré una buena acción y no lo diré a nadie.
7. Sólo por hoy haré por lo menos una cosa que no deseo hacer; y si me sintiera
ofendido en mis sentimientos, procuraré que nadie se entere.
8. Sólo por hoy me harè un programa detallado. Quizá no lo cumpliré
cabalmente, pero lo redactaré. Y me guardaré de dos calamidades:
la prisa y la indecisión.
9. Sólo por hoy creeré firmemente - aunque las circunstancias demuestren lo contrario-que
la buena providencia de Dios se ocupa de mí como si nadie existiera en el mundo.
Sólo por hoy no tendré temores. De manera particular no tendré miedo de gozar
de lo que es bello y de creer en la bondad.
JUAN XXIII
Con mis mejores deseos.
