SANACION POR ARQUETIPOS

Para que se realice una Sanación es imprescindible un cambio de conciencia en el Sanador, es decir, a través de un cambio de ritmos cerebrales, el Sanador debe procurar que el ritmo predominante sea el de un nivel de conciencia más elevada, así la Sanación será mucho más efectiva. Esto permite sanar al paciente, tanto si está con nosotros, como a distancia.

Un Arquetipo es la esencia, la forma energética de algo. El Arquetipo es la idea que anticipa la manifestación de la materia, una fuerza formativa etérica.

En este nivel se trabaja a nivel etéreo con las manos y sin tocar. Empezamos dibujando el muñeco cerilla, lo colocamos en el eje si está mal o descentrado.

El siguiente paso son las Esencias: Esencia Espiritual, Esencia Cielo y Tierra, Esencia Femenina, Cubo, Esencia Masculina. Cada esencia tiene su dibujo, y si la persona está mal, lo notaremos deformado, depende de la deformación que tenga, será un padecer u otro.  Siempre se sana borrando y restaurando. También sucede algunas veces que no podemos dibujar el arquetipo, entonces se le pregunta qué nos quiere decir con esto y nos dan la información. Hay quien la recibe escuchando, sintiendo. Para recibir la información hay que dejar la mente analítica a un lado.

Después pasamos a los cuerpos etéricos: Cuerpo de Energía Vital, Cuerpo Emocional, Cuerpo Mental, Cuerpo Astral, quinto y sexto cuerpos. Existen dieciséis, pero hasta ahora sólo se han podido estudiar seis.

Aquí se trabaja como con una especie de campanas que rodean los diferentes cuerpos, depende de cómo estén las campanas, nos dan una información u otra. Unas tienen manchas, otras son rugosas, también tienen una especie de masas amorfas. Se mira el bajo astral, si está abierto, hay que sanarlo, por ahí se cuela todo lo malo, y hay que sacarlo, una vez limpio, se cierra y se ancla y es muy difícil que se vuelva a abrir. Sin embargo, el alto astral siempre tiene que estar abierto, a no ser que sea algo muy grave y hay que cerrarlo urgentemente dibujando un velo. Cuando terminamos de sanar, se cierra siempre con el Arquetipo de Protección.

Llegamos al Huevo Cósmico. Se mira para saber si la persona que ha fallecido, ha salido de él. Se suele hacer al cabo de dos días, que es lo que suele durar la transición. Si el ser no se ha ido a la luz en este período de tiempo, el huevo se cierra. Hay que abrirlo y decirle al ser con mucho amor, que vaya a la luz, una vez que salga, cerramos el huevo.

El siguiente paso es el Karma. La palabra Karma se refiere a la historia del alma. Debería de considerarse como un factor de equilibrio. Te indica dónde estás en el árbol de la vida.

Son 32 escalones, que representan las 32 experiencias espirituales por las que hay que pasar para formar un alma completa y libre. Nos podemos encontrar con manchas pequeñas, grandes o cortes. Las manchas se pueden restaurar, los cortes, se quedan más finitos, pero siempre van a estar ahí. También podemos preguntar las relaciones kármicas que tenemos con tal persona. Hay varias formas de karma, unas se pueden sanar y otras no.

Al finalizar sellamos con el Arqueómetro, que es la foto que os he puesto al principio. Pedimos el de la persona en cuestión y se encarga de terminar lo que hemos pasado por alto. Sabemos que hemos cometido un fallo, porque las manos se balancean.

Y este ha sido mi curso, lo siento como mío, de muy adentro, es mi forma de sanar, así lo siento y estoy muy feliz.

He resumido todo lo que he podido para no aburrir y que al menos, entendáis un poquito.

Y dentro de un tiempo a por el segundo nivel, el físico.